En una etapa inicial, se diseñaron wireframes estratégicos que permitieron mapear el roadmap completo de los usuarios y de la plataforma, abarcando desde la atracción de leads, el registro, la automatización de mensajes y notificaciones, hasta la entrega del producto final.

Este mapeo no solo ayudó a visualizar el recorrido completo del usuario, sino que reveló los puntos críticos de la experiencia donde era necesario intervenir. Con esa base, se diseñó una interfaz responsiva que diera respuesta a las necesidades de los dos tipos de usuarios que conformaban esta plataforma financiera: quienes colocan préstamos y quienes solicitan crédito personal. Para el primero, se creó un proceso de onboarding claro, un dashboard de gestión intuitivo y una aplicación móvil híbrida que sirviera como herramienta de venta y colocación en campo. Para los solicitantes de crédito, se optimizó cada paso del onboarding y se desarrolló un dashboard funcional que les permitiera dar seguimiento a su solicitud.

Todo el ecosistema digital fue construido sobre un Design System robusto, desarrollado bajo principios de Atomic Design, con enfoque en escalabilidad, consistencia visual y eficiencia para el equipo de desarrollo. Durante todo el proyecto, se implementó una práctica constante de UX Research, utilizando herramientas como Google Analytics, Hotjar y Maze para validar hipótesis, detectar puntos de fricción y evolucionar los flujos de manera iterativa. Uno de los logros más notables fue la reducción del tiempo de registro gracias al rediseño del onboarding, lo que permitió acelerar el acceso al beneficio principal del producto: la posibilidad de generar comisiones rápidamente a través de la colocación de préstamos.